Después de un largo año , con sube y bajas, lleno de despedidas y reencuentros. Llega la época del año donde debemos ver hacia atrás y sentirnos agradecidos por aún estar acá. Por haber llegado hasta estas fechas del año dando lo mejor de nosotros sin dudarlo, pero sucede que cuando en lo largo del año hemos perdido seres queridos , hemos renunciado a seres amados y nos hemos transformado en una versión nuestra que aún no conocemos del todo; estar agradecidos no es algo que surge de manera fácil.
Y entre tanta melancolía nos olvidamos de que cada golpe , cada cambio , cada persona que vino y se fue de nuestras vidas nos ayudó a convertirnos en la persona que hoy somo que sí, tal vez lloramos un poco o quizá mucho pero fue todo eso lo que nos llevó hasta este día y este preciso momento.
Después del 2020, debido a la pandemia perdimos amigos, familiares , compañeros de trabajo y 3 años más tarde aún sentimos esa ausencia y les extrañamos, pero la pandemia no solo nos quitó personas también nos dio oportunidades; ya que aprendimos que hoy podemos estar pero mañana tal vez no por lo que el despertar cada día es una razón por la cual estar agradecido. El poder llamar a nuestros padres o abuelos , a nuestros hermanos y tener la fortuna de poder escuchar sus voces esa es una razón para estar agradecidos, y sino es así, si tal vez nuestros padres o abuelos ya no están con nosotros; y estas fechas duelen más de lo que brinda felicidad. Entonces debemos de recordar que esas personas que se marcharon y ya no podemos ver más, pasaron de estar con nosotros a estar en nosotros; en cada recuerdo , consejo o lección de vida que nos enseñaron porque si bien ya no viven en el mundo pero si en nuestra memoria.
Cada años desde la pandemia nos hemos vuelto más vulnerables el mundo esta aprendiendo sobre la empatía, y eso es parte de nuestra humanidad, por lo que en este 2023 les invito a recibir estas festividades con más amor , con entusiasmo, con melancolía, con sensibilidad y empatía porque de eso se trata estas fechas son para extrañar y memorar a quienes ya no están pero también festejar y celebrar por los que aún nos rodean.